Multa o muerte para judíos en el gueto de Varsovia
Adam Czerniakow, regente del Judenrat de Varsovia, en su oficina.
Desde la invasión alemana a Polonia en septiembre de 1939, los alemanes habían establecido reglas opresivas para la comunidad judía. La administración de la comunidad estaba a cargo del Judenrat, un consejo de judíos que era dirigido por el más anciano. En Varsovia, esta labor recayó en Adam Czerniakow.
Czerniakow había preferido seguir una política de colaboración en lugar de la rebelión, sin embargo, esa labor se convertía en un blanco de críticas e inconformidades de la propia comunidad, que sentía como la opresión continuaba aumentando día a día.
Adam Czerniakow reveló su desgarradora experiencia en varios diarios:
26 de enero de 1940
Citado a la policía (Oberstleutenant Daume). Para mañana, la Comunidad debe pagar 100,000 zlotys por la somanta de una Volksdeutschin (mujer de la etnia alemana). De lo contrario, 100 judíos serán ejecutados. Apelé a la Gestapo por la anulación de la multa, a continuación, por permiso para pagarla en cuotas y, finalmente, para la liberación de la Comunidad de la obligación de limpiar la nieve, lo que nos permitiría ahorrar algo de dinero. No salió nada de esto. Hay que pagar y mañana por eso. En estas circunstancias, empecé una colecta de dinero en la Comunidad. Debemos pedir prestados 100,000 y luego recuperarlo de los contribuyentes.
Al mismo tiempo, la policía nos está presionando para pagar 6,100 zlotys por 61 hombres y mujeres judíos que fueron capturados sin los brazaletes. En vista de todas estas tribulaciones le solicité a las SS ser liberado de la presidencia, ya que resulta imposible administrar a la Comunidad en estas condiciones anormales. En respuesta, me dijeron que esto no era aconsejable.
Me dieron una carta para el Reichskreditkasse por el intercambio de los billetes de cien y quinientos por denominaciones más pequeñas. Mañana será otro día de agonía.
Si deseas saber más, lee “The Warsaw Diary of Adam Czerniakow: Prelude to Doom” [El diario de Varsovia de Adam Czerniakow: Preludio a la perdición], editado por Raul Hilberg, Stanislaw Staron y Josef Kermisz.