Armeros ajustan las espoletas para las bombas GP de 250 libras en sus carros, antes de cargarlos en el Handley Page Hampden Mark I, P1333 ‘EA-F’, del Escuadrón Nº 49 de la Real Fuerza Aérea (RAF) en Scampton, Lincolnshire. El P1333 se estrelló al aterrizar cerca de Breda, en los Países Bajos, al regresar de un bombardeo en Merseburg, Alemania, el 17 de agosto de 1940. Para 1943, el Escuadrón Nº 49 fue equipado con Lancasters.
El Comando de Bombarderos había recorrido un largo camino desde los días aciagos de 1940, cuando volaban bombarderos bimotores y estaban teniendo pérdidas terribles. La decisión estratégica de concentrar una parte importante de los recursos aliados en el bombardeo de Alemania se había tomado mucho antes. Había pocas opciones disponibles, devolver los golpes a Alemania significaba bombardearla.
La colocación de tropas sobre los terrenos de la Europa ocupada para abrir un verdadero “segundo frente” requería de una acumulación logística enorme que tomaría tiempo, y era necesario ganar en primer lugar la batalla del Atlántico. Los bombardeos era lo mejor que podía ofrecerse a la Rusia soviética, que naturalmente deseaban que se abriera un “Segundo Frente” tan pronto como fuera posible.
Así, aunque la política de bombardeo se alejó sutilmente de tan sólo desahuciar a los trabajadores alemanes de sus casas con el fin de minar su moral, a la destrucción de la industria alemana para socavar el esfuerzo de guerra nazi, los objetivos seguían siendo los mismos. Las flotas de bombarderos pesados, que había estado creciendo desde principios de 1942, estaban ahora listas para el despliegue de fuerza y las técnicas de bombardeo de precisión, incluyendo Oboe, eran ahora mucho más refinadas... Ver Más