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Batalla en el Cabo Bon

El crucero ligero italiano Alberto da Giussano. En su catapulta, se puede ver un hidroavión explorador CANT 25AR. El 13 de diciembre de 1941 fue hundido por destructores británicos a las afueras del Cabo Bon.

La situación en el norte de África era desesperada. Las fuerzas británicas estaban avanzando después de la puesta en marcha de la Operación Cruzado. Muchos de los vehículos del Afrika Korps estaban inoperantes y los aviones asignados a la defensa de Trípoli estaban teniendo problemas con el suministro de combustible.

 

Una vez más se le pidió a la Regia Marina italiana que entregara suministros a las fuerzas ítalo-alemanas. Sin embargo, con la llegada de la Fuerza B a Malta, reforzada por los cruceros Ajax y Neptune y los destructores Kimberly y Kingston, bajo el mando del Almirante Rawling, la Marina Real había reafirmado el control de las líneas de suministro en el Mediterráneo.

 

Varios buques italianos habían sido hundidos con gran pérdida de vidas y suministros que eran desesperadamente necesarios para la fuerza norafricana. Se decidió utilizar el acorazado Duilio para proporcionar cobertura general en el Mediterráneo central, pero tan pronto como la flota italiana se retiró, el control británico fue retomado.

 

Para buscar resolver la situación, se decidió utilizar buques militares para entregar suministros a Libia. El crucero Cadorna fue capaz de entregar personal y combustible a Benghazi el 11 de diciembre, dos días antes que el Alberico da Barbiano y el Alberto di Giussano hubieran dejado Palermo rumbo a Trípoli. Los británicos sabían de la misión italiana gracias a ULTRA, que estaba descifrando los mensajes desde Bletchley Park, en Inglaterra.

 

A las afueras del Cabo Bon, en Túnez, en la madrugada del 13 de diciembre, con la ayuda del radar, los barcos británicos maniobraron y lanzaron una andanada inicial de diez torpedos. El di Giussano fue capaz de disparar tres disparos antes de hundirse, mientras que el da Barbiano se convirtió en un infierno imponente, incapaz de devolver el fuego. El almirante de la Flota, Andrew Browne Cunningham, mejor conocido por su apodo “ABC”, recuerda los hechos en su autobiografía:

A las 2:30 am, el 13 de diciembre, los destructores Sikh, Legion y Maori, con el Isaac Sweers de la Marina Real holandesa, que iban a Malta desde Gibraltar, hicieron contacto con cruceros italianos con cañones de 6 pulgadas y dos destructores a las afueras del Cabo Bon, en Túnez. El comandante G. H. Stokes, en el Sikh, era el oficial al mando. Tomando completa ventaja de la sombra oscura de tierra, lideró a sus buques al ataque y en la acción brillante que siguió, ambos cruceros y uno de los destructores fue hundido, mientras que el otro fue dañado. Por esta hazaña, el comandante Stokes fue condecorado con la C.B. [Compañero de La Más Honorable Orden de Bath], una distinción poco habitual para un oficial de su rango.

El Reporte Semanal de la Situación Naval, Militar y Aérea informó algunos de los pormenores del evento:

Antes del amanecer del 13, a las afueras del Cabo Bon, los destructores Sikh, Legion y Maori y el destructor holandés Isaac Sweers, entraron en contacto con los cruceros italianos Alberto di Giussano y Alberico da Barbiano (5,069 toneladas) y dos botes torpederos, en dirección al sur. Un avión Wellington también avistó la fuerza y el enemigo, al escuchar sus motores, viraron de regreso, colocando así a nuestros destructores en una posición más favorable para el ataque. Los barcos aliados tuvieron la iniciativa y abrieron fuego con cañones y torpedos. Los dos cruceros fueron incendiados y hundidos; uno de los torpederos fue hundido y el otro severamente dañado. Nuestras naves no sufrieron bajas ni daños.

Si deseas saber más, lee “A Sailor’s Odyssey: The Autobiography of Admiral of the Fleet Viscount Cunningham of Hyndhope” [La odisea de un marinero: la autobiografía del almirante de la Flota, Vizconde Cunningham de Hyndhope], de Andrew Browne Cunningham.

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