Juicio contra resistentes franceses
Un miembro de la Resistencia francesa sonriendo al escuadrón de fusilamiento que está a punto de disparar.
Agnès Humbert, historiadora de arte, quien había constituido la red de resistencia Musée de l’Homme, habían sido traicionados y encarcelados por la Gestapo. Desde principios de enero, el juicio de Agnès Humbert y varios más de los miembros del movimiento de resistencia francesa se estaba llevando a cabo.
Desafiantes e inconmutables ante el protocolo seguido durante el proceso judicial y temiendo que la sentencia ya estuviera dictada antes de concluir el juicio, Humbert describe con gran detalle las escenas que se desarrollaban día a día:
Prisión de Fresnes, 14 de enero de 1942
La misma actuación hoy, pero esta vez todo en vistas de la lectura de los cargos contra nosotros. Ninguno de nosotros está decepcionado, creo. Todos tuvimos lo que esperábamos y yo obtuve ligeramente más, quizá. Soy acusada de la ‘ofensa’ de escribir, imprimir y distribuir el periódico anti-alemán Résistance y del crimen de espionaje.
La enfermera está todavía en la esquina y el juez cortésmente pregunta a ‘las damas’ si desean la presencia de la ‘hermana’. Es sólo en ese momento que todos nos dimos cuenta que la enfermera está allí para limpiar nuestras sienes en caso de desmayarnos bajo la tensión emocional del interrogatorio. Todos estallamos en carcajadas y respondemos que estamos seguros que la asistencia médica no será necesaria; con una sonrisa, el juez observa que, es gran parte, de la misma opinión.
Si deseas saber más, lee “Résistance: A Woman's Journal of Struggle and Defiance in Occupied France” [Resistencia: el diario de lucha y desafío de una mujer en la Francia ocupada], de Agnès Humbert.
La prisión de Fresnes, en 1942.