Tropas alemanas combatiendo alrededor de la fortaleza Roupel, en el noreste de Grecia.
La Operación Marita se había puesto en acción y las fuerzas alemanas iniciaron intensos bombardeos y ataques a las posiciones defensivas que los griegos estaban ocupando a lo largo de la Línea Metaxas. Las divisiones alemanas habían irrumpido igualmente en territorio yugoslavo y estaban penetrando el área de los Balcanes rápidamente.
No obstante, los alemanes se encontraron con una feroz resistencia tanto de yugoslavos como de los griegos, que no iban a facilitar el avance de las fuerzas ítalo-germanas. Aunado a esto, el terreno montañoso hacía difícil el movimiento de tropas y equipo.
Coordinando al ejército griego se encontraba el general Alexandros Papagos, cuyas memorias describen la intensidad de los ataques alemanes:
7 de abril
En Tracia Occidental el enemigo continuó su progreso en el sector de la Brigada Evros. Alrededor de la 1.30 a.m. del 7 de abril nuevamente bombardearon el Fuerte Ninfea por media hora; luego infantería enemiga atacó el fuerte sin éxito, a pesar de las grandes pérdidas que sostuvo. Hubo un nuevo ataque al amanecer que resultó ser igualmente infructuoso. A las 8 a.m. un tercer ataque también se vino abajo. El fuerte continuó siendo bombardeado a lo largo del día, sufriendo algún daño. Hubo otro ataque renovado ineficaz a las 6 p.m. A las 7 p.m. el fuerte fue vigorosamente bombardeado de nueva cuenta por 45 minutos, sufriendo daños serios. Bombarderos en picada enemigos atacaron por 15 minutos pero con menos daños serios. El bombardeo fue seguido por un ataque de infantería y el enemigo logró aproximarse a las primeras obras de defensa, las cuales comenzó a destruir con dinamita y lanzallamas. A las 9 p.m. algunas de estas obras fueron capturadas por el enemigo después de un combate dentro de ellas. Desde estas fortificaciones el enemigo entonces procedió a lanzar granadas de humo dentro del fuerte y continuó avanzando lentamente detrás de una pantalla de lanzallamas. El fuerte siendo llenado con humo al punto de sofocación, el comandante concluyó que era imposible oponer mayor resistencia y se rindió a las 11.30 p.m. del 7 de abril. El resto de las fuerzas de la Brigada Evros, después de retirarse al Evros, entraron a territorio turco donde fueron desarmados. Sólo una pequeña sección de un batallón que se había retirado hacia Alexandrópolis pudo embarcarse en botes a Macri (al oeste de Alexandrópolis), y fue llevada al interior.
Si quieres saber más, lee “The Battle of Greece 1940-1941” [La batalla de Grecia 1940-1941], del general Alexander Papagos.
En la imagen, artillería alemana haciendo fuego durante la ofensiva en los Balcanes.
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